La biodiversidad como palanca de los proyectos
La eficacia real de las plantaciones urbanas contra la isla de calor: lo que dicen los estudios científicos. ¿Cuál es la eficacia de los árboles urbanos para reducir las temperaturas urbanas? Análisis de los datos científicos y factores clave del éxito.
Enverdecimiento urbano: entre la promesa y la realidad
Ante la aceleración del cambio climático, la ecologización de las ciudades se perfila en muchos proyectos como una respuesta obvia al sobrecalentamiento urbano. Pero tras lo obvio queda una pregunta clave: ¿hasta qué punto son eficaces los árboles para refrigerar los espacios urbanos y proporcionar confort térmico?
Frente a la retórica simplista que equipara la plantación de árboles con resultados medioambientales garantizados, los estudios científicos aportan una visión más matizada, basada en la medición y el análisis de los contextos locales.
Tres factores determinantes: clima, forma urbana y características de las especies
Los efectos térmicos de los árboles urbanos no son automáticos. Su capacidad para reducir las islas de calor depende de tres parámetros interdependientes:
- clima local: temperatura media, humedad del aire, intensidad de la irradiación solar
- morfología urbana: densidad de construcción, orientación de las calles, factor de visión del cielo
- características del árbol: tipo de follaje (caduco, perenne), densidad de hojas (LAI, LAD), altura, forma de la copa
En conjunto, estos factores determinan la eficacia de los mecanismos de sombreado, evapotranspiración y ventilación que permiten a las plantaciones modular las temperaturas a nivel peatonal.
Lo que muestra la literatura científica: resultados cuantificados
Un metaanálisis reciente, publicado en Communications Earth & Environment (Li et al., 2024), resume los resultados de 182 estudios que abarcan 110 ciudades y 17 tipos de clima. Esta revisión ofrece el mejor panorama disponible hasta la fecha sobre la eficiencia térmica real de las plantaciones urbanas.
Reducción de la temperatura (ΔTair) medida :
Clima | Forma urbana | ΔTair máx | ΔTair min | ΔTair media |
Tropical | Abierto (LCZ 4-6) | -4,36 °C | -0,21 °C | -2,57 °C |
Árido | Abierto (LCZ 4-6) | -2,83 °C | -0,52 °C | -2,14 °C |
Templado | Abierto (LCZ 4-6) | -2,07 °C | -0,04 °C | -1,33 °C |
Continental | Abierto (LCZ 4-6) | -2,91 °C | +0,14 °C | -1,55 °C |
Nota: en las zonas urbanas densas (LCZ 1-3), la eficacia es menor, con el riesgo de un efecto inverso por la noche (atrapamiento del calor).
Factores que amplifican el efecto refrigerante :
- especies mixtas (caducifolias + perennifolias) en climas templados, continentales y tropicales
- Doseles densos y bien desarrollados (LAI / LAD elevados)
- instalación en espacios abiertos con buena circulación de aire
Factores limitantes :
- cierre estomático (cierre de los poros de las hojas) durante olas de calor prolongadas
- plantaciones jóvenes (eficacia muy limitada antes de la madurez)
- vegetación demasiado densa en una morfología compacta, con escasa ventilación nocturna
No hay que confundir vegetación con biodiversidad, ni plantación con eficiencia climática
La elección de las especies, su densidad, su disposición y su adecuación al contexto climático son parámetros técnicos esenciales. Es peligrosamente simplista equiparar la plantación de árboles a la producción automática de biodiversidad o a una solución térmica universal.
La biodiversidad, al igual que el rendimiento climático, no puede decretarse: debe diseñarse, medirse y evaluarse con métodos adecuados.
Evaluar estrategias, certificar resultados: el papel del tercero independiente
En este contexto, la evaluación independiente de las estrategias de ecologización es esencial si queremos salir del ámbito de las intenciones y acercarnos al de la eficacia real. Indicadores de rendimiento, métodos de medición (ΔTair, UTCI, PET), contextualización de los resultados: todos ellos son palancas que pueden utilizarse para ajustar las opciones y evitar falsas promesas.
Como certificador independiente, el trabajo de IRICE se ajusta a estos requisitos metodológicos, para garantizar la solidez de los planteamientos medioambientales de los propietarios de proyectos, promotores y autoridades locales.
Conclusión: actuar con método, no con eslóganes
Los árboles son una valiosa palanca de acción. Pero, como todas las palancas, su eficacia depende de las condiciones en que se utilicen.
Plantar no es lo mismo que probar. Medir, adaptar y certificar: así se construyen estrategias creíbles para combatir la isla de calor urbana.
Referencias
Li, H., Zhao, Y., Wang, C., Ürge-Vorsatz, D., Carmeliet, J., Bardhan, R. (2024). Cooling efficacy of trees across cities is determined by background climate, urban morphology, and tree trait. Communications Earth & Environment, 5:754. DOI : https://doi.org/10.1038/s43247-024-01908-4